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3 pasos para tu concepto de email marketing

Newsletter hoy en día te empujan a casi todas partes, a menudo en los primeros segundos de tu primera visita. Si quieres hacerte valer en esta sobrecarga de información del marketing por correo electrónico, necesitas absolutamente un buen concepto de contenido. En este artículo te damos algunas ideas. También te explicamos cómo encontrar la frecuencia y el diseño adecuados para tus correos.

 Esta es la segunda parte de una serie de artículos sobre el email marketing. Puedes encontrar el primer artículo sobre los fundamentos del marketing por correo electrónico aquí.

El buen email marketing es más raro de lo que debería ser

Me suscribo a boletines de empresas (newsletters) y organizaciones por puro interés profesional. Simplemente tengo curiosidad por ver qué puedo aprender de ellas. Los resultados suelen ser de dos tipos:

  1. La empresa se ha olvidado más o menos de que utiliza el email marketing. Nunca o muy irregularmente recibo una newsletter. ¿Quizá la persona responsable está sobrecargada de otras tareas o no hay nadie responsable?
  2. Por el contrario, me inundan con correos electrónicos llenos de ofertas especiales y otras promociones de ventas, que, sin embargo, rara vez tienen algo que ver con mis intereses reales. Lema: Mucho ayuda mucho. ¡Envíalo todo!

Curiosamente, esto es cierto para organizaciones de distintos tamaños, con grupos destinatarios muy diferentes y de sectores diversos. Sin embargo, cuanto mayor es la organización, más probable es verse abrumado/a por demasiados correos electrónicos.

Tal avalancha es especialmente un problema si los correos electrónicos también son irrelevantes.

 Un ejemplo: acabo de comprar algo y poco después recibo un correo electrónico promocional con el emocionado anuncio de que ahora mismo hay un 20% de descuento en todo (excepto en comida para mascotas). ¡Estupendo! Muchas gracias por esta pista de que, una vez más, me he gastado demasiado dinero...

En general, por desgracia, el "email marketing" se equipara demasiado a menudo con las newsletters publicitarias y como los costes de los envíos masivos son tan bajos, la gente va realmente al límite. La sorpresa es grande cuando el resultado final es mixto.

En este artículo, me gustaría mostrarte cómo hacerlo mejor. En la parte anterior de esta serie, ya te mostré lo diverso que puede ser el marketing por correo electrónico. ¡No se trata solo de mensajes publicitarios! Newsletters, series de correos electrónicos e incluso los correos electrónicos transaccionales pueden cumplir distintas tareas. Pueden llamar la atención de nuevos/as clientes/as potenciales, hacer que la clientela existente esté más satisfecha y, en general, garantizar que se te reconozca con tus ofertas y permanezcas en su memoria.

¿Pero cómo lo haces exactamente?

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1. Encontrar el contenido adecuado

En el espíritu del marketing de contenidos y de una estrategia general de contenidos, tu comunicación debería consistir en alimentar las relaciones y construir una comunidad. Con demasiada frecuencia esto se olvida o no se toma en serio.

Muchas empresas tienden a pensar a corto plazo y no es de extrañar: los seres humanos tendemos a preferir una pequeña recompensa a una gran recompensa si la pequeña recompensa es inmediata. Esto es aún más cierto si la recompensa posterior, mayor, no está garantizada. 

Por eso las empresas quieren ante todo aumentar sus cifras aquí y ahora y no piensan tanto en sus posibles éxitos de mañana y pasado mañana. La forma en que los objetivos fijados puedan alcanzarse el año que viene o dentro de cinco años solo tiene una importancia secundaria en ese momento. 

Especialmente como freelancer o agencia más pequeña, esto no debería ocurrirte. Puedes (también) utilizar el correo electrónico para ganar confianza, construir una buena reputación y reforzar la fidelidad de los/as clientes/as existentes.

Piensa, por ejemplo, en un concepto de correo electrónico que también trate otros temas que puedan interesar a tu público. Ejemplos de ello:

  • Noticias generales y tendencias de tu sector comercial
  • Impresiones de tu trabajo y tareas entre bastidores
  • Textos breves con un toque personal, similares a un blog o una columna
  • Artículos útiles que explican términos o presentan una nueva herramienta interesante
  • Pequeñas instrucciones, así como consejos y trucos

Como ejemplo, ya recomendé el newsletter WordPress mensual de Raidboxes en la primera parte de esta serie de artículos.

Como freelancer o agencia, tienes la gran ventaja de estar muy cerca de tu clientela. Puedes aprovecharlo perfectamente en este caso. Oirás preguntas o te enfrentarás a problemas de la clientela. Así que ya sabes de primera mano qué mueve a tu grupo objetivo. Las grandes empresas tienen que encargar primero costosas encuestas que llevan mucho tiempo.

Si haces activamente marketing de contenidos y marketing en redes sociales, tendrás contenidos que podrás utilizar dos veces. O sucede al revés: escribes algo para newsletters que también puede utilizarse en otros sitios.

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La newsletter de Raidboxes con contenidos del blog y noticias y opiniones

La tendencia hacia los boletines pagados ya demuestra lo populares y valiosos que pueden ser estos correos electrónicos. Funcionan especialmente bien cuando ofrecen a un grupo objetivo claramente definido ideas y consejos que no pueden encontrar fácilmente en otros sitios. Básicamente, es comparable al papel que desempeñan las revistas especializadas, solo que más pequeñas y centradas.

Piensa en una oferta por correo electrónico que sea principalmente informativa, interesante y relevante. Utilízala solo ocasionalmente para autopromoción.

Al mismo tiempo, esto no significa que no debas hablar en absoluto de ti mismo/a y de tus ofertas. Eso sería igual de extremo y poco útil. Si tienes un nuevo producto interesante que es especialmente relevante para tus lectores, no temas incluirlo en las newsletters o enviar un correo electrónico aparte. Solo asegúrate de limitarte a los momentos más importantes y, al mismo tiempo, recompensa a tu público: podrían obtener el primer acceso o un precio de oferta especial. La publicidad ya no se percibe (solo) como publicidad, sino como un beneficio monetario, por así decirlo. Estas "golosinas" pueden ser incluso una razón para permanecer en tu lista de distribución de correo electrónico.

Para el contenido, también puedes pensar en una mezcla de contenido automatizado y creado manualmente. Podría haber una sección con las cinco últimas ofertas, pero también un editorial escrito por ti.

2. La frecuencia perfecta para tu email marketing

¿Con qué frecuencia debes ponerte en contacto con tus destinatarios/as? Por desgracia, como suele ocurrir, no hay una respuesta clara a esta pregunta. 

La fórmula de la frecuencia

La frecuencia de tus mensajes debe adaptarse a los hábitos y expectativas de tus lectores/as, por un lado, y a tus posibilidades, por otro. 

No tienes que enviar una newsletter a diario. Incluso semanalmente no es necesario. Sin embargo, no debe ser menos de una vez al mes, de lo contrario se olvidarán de ti. Entonces, algunos/as destinatarios/as ya no sabrán por qué reciben este correo electrónico y, en el peor de los casos, lo marcarán como spam.

Si eres completamente nuevo/a en este campo, empieza poco a poco. La oferta multimedia crece con el tiempo. Está perfectamente bien enviar un correo electrónico con tres contenidos cada quince días más o menos. ¡La relevancia es mucho más importante! Clase en lugar de masa.

A veces, los editores de newsletters dejan que sus lectores/as decidan con qué frecuencia quieren recibir información. Esto puede ser una buena idea, pero también puede abrumar a los/as usuarios/as. Una regla básica es facilitar al máximo la suscripción a tu lista de correo. 

En su lugar, podrías ofrecer una frecuencia diferente como alternativa si alguien quiere darse de baja. De este modo no pierdes a los/as lectores/as que están interesados/as en tu contenido pero que reciben demasiados correos.

3. El tema del diseño en los correos electrónicos

Otro elemento importante es la presentación visual de los correos electrónicos. Hoy en día apenas se encuentra texto puro en newsletters. En su lugar, al igual que en los sitios web, se utilizan fotos, gráficos, colores y fuentes.

Hay muchos buenos argumentos para ello. Por ejemplo, probablemente quieras que tu identidad corporativa se refleje en el diseño. Además, los gráficos y las fotos atraen más la atención y pueden apoyar una apelación emocional.

El mayor problema es que, por desgracia, el panorama de los clientes de correo electrónico está enormemente fragmentado. En otras palabras: mientras que existe una base bastante amplia de opciones de diseño generalmente disponibles para los navegadores, lamentablemente no ocurre lo mismo con el correo electrónico. Gmail en el navegador, Outlook en el PC o la aplicación Mail en el iPhone pueden mostrar el mismo correo electrónico de formas muy diferentes. A veces tan diferentes que apenas se pueden utilizar.

Esta es otra razón por la que se ha convertido en una práctica habitual incluir un enlace a la versión web de la newsletter justo al principio del correo electrónico.

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Se hace referencia al navegador en la parte superior.

Otro obstáculo son las fotos. Si quieres estar seguro/a de que se mostrarán, puedes enviarlas como archivo adjunto. Sin embargo, debes evitarlo salvo en algunos casos excepcionales. El correo electrónico será rápidamente demasiado grande y los mensajes con archivos adjuntos serán examinados con más atención por los filtros de spam y malware. Esto puede hacer que no se entregue.

Por tanto, en la mayoría de los casos, las imágenes se cargan desde la red en cuanto se llama al correo electrónico. Sin embargo, esto solo funciona si la persona receptora también está en línea y permite las imágenes.

Hay buenas razones para desactivar las imágenes en los correos electrónicos o compartirlas solo cuando sea necesario. Algunas personas pueden estar en movimiento y no quieren abusar del paquete de datos de su plan de telefonía móvil. Para otros, es una cuestión de privacidad. Especialmente en las empresas, las fotos en los correos electrónicos pueden estar desactivadas por principio, por motivos de seguridad. Por desgracia, hay muchas otras razones por las que la carga de imágenes puede ir mal.

Por tanto, debes asumir que tu correo electrónico, con su elaborado diseño, no será recibido en absoluto por tus lectores/as. Por tanto, además del enlace a la versión web ya mencionado, también es buena idea dar a tus imágenes textos alternativos. Esto también ayuda a todas las personas que utilizan un lector de pantalla.

Conclusión para tu concepto de email marketing

En última instancia, debes dedicar tiempo y energía principalmente al concepto de contenido. Este es el elemento decisivo. Si puedes explicar exactamente por qué la gente debería suscribirse a tu newsletter, también atraerás a nuevos/as lectores/as. 

"Mantente al día de nuestras ofertas" no es suficiente en la actual sobrecarga de información.

En el próximo post de esta serie, entraré en más detalles sobre cómo entusiasmar al público con tu newsletter y lo que tienes que hacer para llegar realmente a los/as mismos/as.

Tus dudas sobre conceptos de email marketing

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